Cinco viajes por carreteras norteamericanas para hacer al menos una vez en la vida

Por Adam
viernes, 23 de marzo de 2018

Una increíble y maravillosa costa: viaje por las carreteras de Florida

Fue Ernest Hemingway quien dijo que "con el fin de escribir acerca de la vida, primero hay que vivirla". No es ninguna sorpresa para nosotros que el escritor eligiera la dinámica Cayo Hueso como su hogar. Con básicamente 160 kilómetros de puentes que serpentean entre pequeñas islas, los viajes por carretera de Florida hacia el sur desde Miami por los cayos permiten disfrutar de una experiencia realmente única.

Si el marisco fresco, las serenas playas de arena dorada y la sublime naturaleza tropical no son suficientes para ganarse tu admiración, es seguro que sí lo hará el hospital de tortugas en Marathon. Aquí podrás conocer de primera mano todos los trabajos que se están realizando con las tortugas en peligro de extinción cuando son rescatadas, rehabilitadas y liberadas en el medio silvestre. Hay que tener en cuenta que la carretera a lo largo de los cayos puede estar cerrada debido a los avisos por inclemencias meteorológicas, así que asegúrate de comprobar las condiciones antes de salir.

La clásica carretera norteamericana: la Ruta 1

Con un serpenteante trazado a lo largo de la costa occidental que permite disfrutar de la majestuosidad de las construcciones humanas con el Puente Golden Gate, pasando por enclaves naturales con escarpadas laderas y agitados océanos en Big Sur y llegando hasta Los Ángeles, queda claro de inmediato por qué la Ruta 1 se ha convertido en uno de los más míticos viajes por carretera de Estados Unidos.

Este viaje por carretera atraviesa una gran variedad de lugares y actividades de interés que te permitirían pasarte toda una vida viajando de arriba a abajo sin experimentar el mismo viaje dos veces.

Únete al sueño americano en la hedonista ciudad de Los Ángeles, descansa entre los ondulantes viñedos y los manantiales termales de Paso Robles o canaliza la energía creativa beatnik en San Francisco, donde los largos días se van transformando en noches de ensueño en los animados bares locales.

Una escapada al Estados Unidos residencial: Cabo Cod

Si estás viajando a grandes ciudades como Boston o Nueva York, la franja de tierra cercana que se adentra en el Atlántico te proporciona un magnífico enclave para hacer una escapada a una ciudad pequeña. Cabo Cod (o simplemente '"el cabo" si quieres parecer de la zona) es el patio de recreo favorito de muchos de los habitantes de la gran ciudad los días soleados, aunque la extensa franja de litoral siempre te permitirá encontrar un lugar tranquilo solo para ti.

A través de tu ventanilla podrás ver kilómetros y kilómetros de playas solamente interrumpidos por algunos restaurantes especializados en marisco, originales complejos vacacionales o heladerías de estilo clásico. No dejes de detenerte en Hyannis para realizar un recorrido de observación de ballenas por la costa, ya que las cálidas aguas del cabo dan la bienvenida a estos colosales animales durante todo el verano.

La ruta por el solitario oeste: circuito hasta Las Vegas

¿Prefieres un abrasador desierto a aguas azules y cristalinas? Así sucede con muchos de los amantes del juego que se embarcan en este icónico viaje por las tierras de los spaghetti westerns. Comenzando en Los Ángeles, podrás tachar de tu lista un total de cuatro estados cruzando el simbólico Valle de la Muerte, el famoso Gran Cañón y disfrutando de las brillantes luces y del trepidante ambiente del Strip de Las Vegas, todo en un mismo recorrido.

Al discurrir por un desierto, las temperaturas en esta ruta alcanzan los 45 ºC de media desde junio hasta agosto, así que es mejor dejar los meses de verano para la población local de lagartos. Puedes creernos: el paisaje sigue ofreciendo su mejor vista a unos moderados 30 ºC en primavera y en otoño.

La joya del sur profundo: la Great River Road en Mississippi

A diferencia de lo que nos quieran hacer creer los juegos infantiles para aprender a contar, solo hay un Mississippi. A medida que la carretera se adentra cada vez más en el sur profundo y el sol acaricia con sus rayos más luminosos las aguas de este legendario río, tú desearás que este viaje no se acabara nunca. Puedes comenzar tu recorrido en Chicago o puedes unirte a la ruta en cualquiera de los 10 estados que atraviesa entre ese punto y Nueva Orleáns disfrutando de música en vivo, una excelente gastronomía y apacibles paisajes.

No hay nada igual a las interminables tardes contemplando los polvorientos paisajes del sur profundo, disfrutando de un sándwich de carne a la barbacoa acompañado de una limonada de Lynchburg y bajo la sombra de un cerezo. Cuando ya al final el radiante sol se oculte al llegar a tu destino final, únete al resto de Nueva Orleans para disfrutar de la animada vida nocturna que reina en este lugar desde el anochecer hasta el amanecer.